¡Hemos colocado a la niña!

Bibiana Aído

Ante la previsible debacle en las próximas elecciones del PSOE, se suceden las carreras frenéticas para colocar al personal en puestos que les permitan servir a España desde instancias internacionales.

'El País' describe en su titular a la perfección el inmenso servicio que estos aspirantes prestan a España con sus candidaturas. La de Miguel Ángel Moratinos y la de Bernardino León aún no han logrado el nombramiento oficial; pero a cambio de esa angustia que nos corroe, ansiosos de recibir la buena nueva, hoy hemos sido compensados con creces con la publicación en la web de Naciones Unidas del nombramiento como asesora de Michelle Bachelet, de nuestra joven, experta y muy preparada Bibiana Aído, que tantos buenos momentos nos proporcionó durante el tiempo en que ejerció como ministra de igual-da.

Estamos encantados de que Bibiana sea la primera en ayudar a que España salga de la segunda división en los organismos internacionales; porque sin duda, es la que mayor gloria y lustre va a proporcionar al país, demostrando en su calidad de asesora de Bachelet el excelso nivel de los miembros del actual Gobierno.

Vean los méritos del resto de los cargos que acompañan a Bibi en tan alto organismo. Comparten un historial de servicios, tanto en su país como en las NU que demuestra una amplia experiencia. Por ello, da gloria leer el currículum que acompaña el nombramiento de Aído:

Bibiana Aído Almagro (España), Asesor Especial del Director Ejecutivo de Gestión y Administración.

La Sra. Aído ofrece una distinguida carrera de servicio público para el Gobierno de España (delegada provincial de la Consejería de Cultura de la J.A. en Cádiz, directora de la Agencia para el Desarrollo del Flamenco dentro de dicha consejería, Ministra de Igualdad). En la actualidad desempeña el cargo de Secretaria de Estado de Igualdad. La sra. Aído creó (sic) el Ministerio de Igualdad; hasta 2010 fue Ministra de Igualdad y ha trabajado extensamente para la transversalización de género en la política de desarrollo española (sea esto lo que sea, aunque la mayoría de los españoles lo traducimos como una suma de despropósitos difícil de superar), así como en la igualdad de género y la perspectiva de género en diversos foros internacionales de alto nivel, tales como la Unión Europea para el promoción de la estrategia europea y el Observatorio Europeo contra la violencia de género.

En fin, que hemos colocado a la niña y lo de menos son los dineros que nos costó el organismo de marras a lo largo de estos años. Ojos que no ven, corazón que no siente y en la distancia y dadas las escasas posibilidades que ofrece su cargo para que sus ocurrencias sonrojantes tengan eco en los medios, este nombramiento nos ofrece un grado de tranquilidad en cuanto a las seguras ocasiones en que nos haría morir de vergüenza con su piquito de oro, si se divulgaran sus palabras. Pequeño, es cierto; porque se ha despedido prometiendo volver. 

¡Qué poco dura la dicha en la casa del pobre!