16/10/11

La nota discordante



El blog de María Antonia Trujillo

Hoy ocurrió algo en apariencia poco importante; pero que me parece alentador. La ex Minixtra de Vivienda, María Antonia Trujillo, rompió en Twitter la «ley del silencio» que impuso en su momento José Luis Rodríguez Zapatero dentro del Partido Socialista, con mano de hierro.

Por grandes que fueran sus barrabasadas, todos callaban, todos aplaudían, incluso cuando fue evidente que había llevado al despeñadero al Partido, Felipe González apoyó la mordaza reivindicando «militancia». 

Ayer se dio a conocer el programa del candidato. Una de sus medidas para remontar la crisis es obligar a las empresas a adoptar la paridad en los Consejos de Administración y María Antonia Trujillo, hoy, dio su opinión haciendo ver que un partido que no tiene ninguna mujer en un cargo de responsabilidad en su estructura, que no ha llevado a la Presidencia de las distintas Comunidades a ninguna mujer, no puede exigir que otros hagan lo que él no hace.

Le saltaron a la yugular; por supuesto. Ella, en lugar de desdecirse o matizar, replicó, incluso llegó a cometer un delito de lesa majestad hacia su partido, mostrando envidia por la apuesta del PP, en el que hay varias mujeres presidentas de Autonomías, una en la secretaría general, otra en la secretaría de organización... 

Trivial, sin duda, en términos objetivos. En términos políticos, sin embargo, muy relevante; porque no se trata de las críticas «posicionales» que vienen formulando algunos barones aspirantes al cargo de Secretario General y sacan pecho para atraer la atención con vistas al futuro. Trujillo no tiene ninguna aspiración en ese sentido y formula su crítica desde el hastío de una militancia harta de la hipocresía y la falta de coherencia en el Partido

Tiene suficiente experiencia, además, para medir las consecuencias que pueden derivar de esas manifestaciones públicas que atacan con especial fuerza la campaña del candidato, porque son «fuego amigo», sin duda han sido recogidas por los rivales y saldrán a la palestra del debate en el momento oportuno, que será aquel en el que más daño puedan hacerle al candidato.

La acusarán de deslealtad; puede que la suspendan de militancia. Sin embargo, lo mejor que puede pasarle al PSOE es que se rompa la mordaza y los militantes puedan expresarse con libertad

Si España está en ruinas tras la era ZP, el partido está tan destrozado como la nación. Los ciudadanos tendremos que hacer un sincero ejercicio de reflexión sobre la necesidad de aceptar más sacrificios y privaciones de lo que podemos imaginar cuando llegue el nuevo Gobierno y pueda aquilatar el alcance real de los daños, en especial en el área económica. 

A la vez,  los militantes del PSOE tendrán que evaluar, también los daños, analizar por qué y cómo llegaron a esa devastación y poner en marcha una regeneración completa del Partido. En ese contexto, la voz crítica de los militantes tiene un valor extraordinario y es la única vía para hacer de la catástrofe una oportunidad excelente para conquistar un nuevo futuro. 

4 comentarios:

Gulliver dijo...

Lo deprimente de nuestros políticos, Dª Carmen, es que sólo se atrevan a mostrar sus ideas cuando ya son "ex".

Carmen Quirós dijo...

Otra cosa deprimente es que nuestros políticos carecen de ideas en la fase previa al ex. ¡Dura vida!

Unknown dijo...

La parida de Zapatero-que no paridad-ha sido colocar en el Gobierno de España a una colección de inexpertas/ineptas, que no saben lo que es luchar por un trabajo digno porque todo se lo han regalado, yendo ya ellas cortitas de mollera. La Pajín nos contaba tiernamente sus encuentros con sus compañeros/as de facultad, todos/as mileuristas, y cómo ella pagaba las copas en el bar. La "ha ido" a "bibir" en Nueva york, colocará posavasos en inglés por todos los puticlubs de Road cobrando un sueldazo millonetis+dietas, porque no sabe hacer otra cosa para defender a las mujeres; y la Maleni, partía, seguirá destrozando todo aquello que toca. Es el legado que nos deja el oligofrénico/misógino de León: la paridad/parida de incompetentes/as bien acomodados/as en las instituciones para seguir viviendo a costa de los demás españoles/as, elegidos/as para no hacer sombra a un presidente que no tenía dos dedos de frente pero sí gran osadía. La paridad es una tontería: que merezca responsabilidad quién la pueda asumir independientemente de su sexo.
Un saludo.

Carmen Quirós dijo...

Estoy totalmente de acuerdo con usted, Jano. A mí lo de la paridad me saca las muelas; pero hoy he tenido ocasión de escuchar una disertación sociológica sobre los criterios feministas que las llevan a reclamar esas cosas y no sé si sentirme culpable de mi escepticismo.
Un saludo.